Las políticas regionales y de cohesión territorial

TEMA 10: La organización territorial y los desequilibrios regionales

La organización político-administrativa de España

El territorio español se delimita mediante fronteras. En el interior, tiene una organización político-administrativa descentralizada, tiene divisiones territoriales con capacidad de autogobierno: las comunidades autónomas, las provincias y los municipios.

1 La Evolución histórica de la organización político-administrativa.

En la Antigüedad, bajo el dominio romano se crearon las primeras provincias, que eran escasas. Durante la Edad Media, durante el periodo musulmán, organizaron etapas de unidad y de fragmentación del territorio en las que las provincias se convirtieron en los cinco reinos Peninsulares independientes: Portugal, Castilla y León,  Corona de Aragón, Navarra y Granada. Durante la Edad Moderna, con los Reyes Católicos y después con los Austrias, cada reino mantuvo sus propias estructuras político-administrativas y fiscales; pero con los Borbones, el territorio se dividíó administrativamente en capitánías generales (para el Gobierno) y en intendencias (para la Hacienda y el desarrollo económico), sólo Navarra y el País Vasco conservaron sus propias instituciones. Durante el Siglo XIX se realizó una nueva división provincial que coincide prácticamente con la actual, y se completó la supresión la mayoría de instituciones de  Navarra y el País Vasco. En el Siglo XX se aprueban los estatutos de autonomía del País Vasco y Cataluña, pero fueron abolidos con el franquismo.

2 La organización actual

2.1 Las divisiones político-administrativas

La organización político-administrativa actual es propia de un Estado descentralizado, que reparte la toma de decisiones en tres divisiones territoriales con capacidad de autogobierno:

  • El municipio es la entidad territorial básica. Está formada por uno o varios núcleos de población y el territorio dependiente de ellos. Su función es prestar servicios. El gobierno y la administración municipal corresponden al ayuntamiento, formado por el alcalde y los concejales.
  • La provincia es una entidad territorial local formada por una agrupación de municipios. Su función es fomentar los intereses provinciales como prestar servicios. El gobierno y la administración provincial corresponden a la diputación, formada por un presidente y los diputados.
  • La comunidad autónoma (surge tras el franquismo) es una entidad territorial formada por provincias limítrofes, territorios insulares, están dotadas de autonomía legislativa y capacidad de autogobierno sobre asuntos de sus competencias.

2.2 El Estado de las autonomías

2.2.1 El proceso de formación del estado autonómico

  1. El período preautonómico se inició poco después de la muerte de Franco. Se formó un mapa con catorce preautonomías que coincidíó casi con el actual.
  2. El período autonómico se inició tras la promulgación de la Constitución del 78, que reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades. Todas las comunidades obtuvieron las autonomías (de diferente forma), Ceuta y Melilla quedaron como municipios autónomos que carecen de capacidad legislativa.

2.2.2 La organización del Estado autonómico (carácterísticas)

– Cada comunidad autónoma se halla regida por su Estatuto de autonomía.

– Las comunidades pueden asumir competencias, que pueden ejercerse de forma exclusiva o compartida con el Estado.

– Las instituciones de cada una son:

  • La Asamblea Legislativa o Parlamento autonómico (elabora la legislación).
  • El Consejo de Gobierno, ejerce el poder ejecutivo.
  • El Tribunal Superior de Justicia, representa el poder judicial.

– La financiación, responde a dos modelos: el régimen común (con ingresos propios y tributos cedidos por el Estado) y el régimen foral (con tributos de su propia administración); y además, las más desfavorecidas reciben ingresos de los Fondos de Compensación Internacional (FFCI)  para evitar desequilibrios territoriales.

– El Estado de las autonomías se basa en la igualdad territorial y en la solidaridad.

Los desequilibrios territoriales

1. Las diferencias espaciales

A pesar de que el Estado de las autonomías se basa en la igualdad territorial y la solidaridad, existen desequilibrios socioeconómicos y demográficos entre las CCAA y en el interior de ellas. Las causas son: diferentes condiciones naturales y desigual distribución de los recursos, la localización de las actividades económicas y las actuaciones humanas. Los indicadores de estos desequilibrios son numerosos:

  • Los d. Económicos se observan en la capacidad productiva y se miden por el PIB y el PIB per cápita.
  • Los d.  demográficos se manifiestan en la distribución de la población, medida por la densidad de población.
  • Los d. Sociales se reflejan en la renta bruta disponible de los hogares y el nivel de bienestar, medido por la dotación de infraestructuras.

2. La evolución de los desequilibrios

2.3 Los desequilibrios territoriales actuales

A partir de 1985, la crisis cambió los factores en que se basan los desequilibrios territoriales y la jerarquía espacial.

2.3.1 Los nuevos factores de los desequilibrios actuales

La industria pierde peso como factor de desarrollo. Los servicios avanzados, la innovación y la alta tecnología se convierten en los principales factores de desarrollo.

2.3.2 La jerarquía espacial actual

La jerarquía espacial resultante de la incidencia de estos nuevos factores está constituida por tres tipos de territorios:

– Los ejes de dinamismo: son las regiones más favorecidas por los nuevos factores de desarrollo: Madrid + Y (País Vasco + litoral mediterráneo + valle del Ebro).

– Los ejes en declive: son los espacios muy especializados en sectores industriales maduros o en crisis: cornisa cantábrica.

– Los espacios menos dinámicos: son los que cuentan con un mayor peso económico del sector primario: interior peninsular + Galicia + Andalucía + Murcia.

Las políticas regionales y de cohesión territorial

1. Las bases de la política regional

Las políticas regionales son el medio de paliar los desequilibrios regionales de un Estado y de fomentar el desarrollo regional.

En España la política regional se inición en los 60’ con los Planes de Desarrollo, y a partir de 1986 a una nueva política regional marcada por:

  • El deseo de llevar a la práctica el principio de la solidaridad interterritorial.
  • El establecimiento y el desarrollo del Estado de las autonomías.
  • La adhesión a la Comunidad Europea.

2. La política regional y de cohesión de la Uníón Europea 2007-2013

Tras su ingreso en la Comunidad Europea, en 1986, España se integró en la política regional europea.
Desde entonces ha recibido fondos comunitarios y su política regional debe ser aprobada por la Uníón Europea. Sus objetivos son:

  • La Convergencia pretende aproximar a las regiones menos desarrolladas a las más avanzadas.
  • La Competitividad Regional y el Empleo se propone mejorarlo.
  • La Cooperación Territorial Europea.

Los instrumentos de la política regional europea son:

  • El FEDER, que financia inversiones destinadas a reducir los desequilibrios territoriales.
  • El FSE, que financia actuaciones destinadas a desarrollar los recursos humanos.
  • El Fondo de Cohesión, financia exclusivamente inversiones públicas en medio ambiente y en redes de transporte.

Las repercusiones de la política regional europea en España son:

  • Ha supuesto una cierta cesión de la soberanía a la UE.
  • Ha permitido recibir ayudas que han favorecido la convergencia española con Europa.
  • Ha reducido los desequilibrios interterritoriales, al concentrar las ayudas en las zonas desfavorecidas.

3. La política regional del Estado

Sus objetivos son lograr un desarrollo regional equilibrado potenciando a las regiones más desfavorecidas, y fomentar el potencial endógeno, para lo que hay que:

  • Consolidar el crecimiento de las áreas más dinámicas.
  • Detener el declive de la cornisa cantábrica.
  • Impulsar el despegue del eje Mediterráneo Sur.
  • Apoyar el resto de las regiones.

Los instrumentos de la política regional estatal para conseguir fomentar la economía de las zonas desfavorecidas son: la concesión de incentivos regionales (ayudas financieras concedidas por el Estado) y los Fondos de Compensación Interterritorial.

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