Demografía de España: Distribución, Natalidad, Mortalidad y Migraciones

La Población Española: Distribución y Factores Demográficos

La Distribución de la Población

La población no se distribuye de forma homogénea, sino que existen territorios muy poblados y otros casi vacíos. Esta distribución desigual se explica por diversos factores:

Causas de la Distribución Poblacional

  • Factores naturales: Los climas extremos no atraen población, y las zonas con un relieve montañoso muy marcado también dificultan el asentamiento.
  • Factores económicos: Las áreas con un alto nivel de desarrollo económico atraen a la población, mientras que en los lugares más pobres la densidad de población es menor.
  • Factores históricos: Las zonas con mayor interés histórico o cultural también atraen población.
  • Movimientos migratorios: Explican que haya zonas que progresivamente vayan perdiendo población y otras que la vayan ganando.

La Distribución de la Población en España

En España, la densidad de población media es de 93 hab/km². La mayor parte de la población se concentra en las provincias de la costa, a excepción de Lugo y Huelva (con menos de 50 hab/km²). Las provincias del interior son las que tienen menores densidades de población, aunque existen excepciones.

Las comunidades autónomas con mayor densidad son Ceuta, Melilla, Madrid, Cataluña, País Vasco, Comunidad Valenciana, Baleares y Canarias, siendo todas comunidades costeras, excepto Madrid.

Las comunidades con densidad de población más baja son Castilla-La Mancha, Extremadura, Castilla y León y Aragón.

Zonas de Baja Densidad (Interior)

Las zonas de interior están más vacías por:

  • La crisis de la ganadería lanar, lo que provocó el declive de las zonas del interior donde se concentraban las mayores industrias ganaderas y laneras.
  • La dificultad de las comunicaciones debido al relieve, pero sobre todo al diseño radial de carreteras y ferrocarriles, lo cual dejó muchos puntos incomunicados.
  • Madrid, como capital de España, implica que la gente tiende a dirigirse hacia la capital, atrayendo población del interior.

Zonas de Alta Densidad (Costeras)

Las altas densidades de población en las zonas costeras se explican por:

  • El desarrollo del comercio y el transporte marítimo, especialmente a partir del siglo XVIII con los decretos que permitían el libre comercio con América desde cualquier punto de España.
  • El desarrollo industrial de las zonas costeras, que crecieron mucho más que las zonas de interior.
  • El desarrollo del turismo, que genera un gran movimiento y numerosos puestos de trabajo, atrayendo a la población a estas áreas.

La Natalidad

La Tasa de Natalidad Bruta

A principios del siglo XIX, la tasa de natalidad era de 40‰, una cifra muy alta. A partir de entonces, fue descendiendo muy lentamente. En 1930, estaba alrededor de un 30‰, cayendo drásticamente por la Guerra Civil hasta una tasa de 20‰. A finales de los años 40 y 50, la tasa de natalidad se recuperó, pero a partir de 1975, cayó progresivamente hasta alcanzar un mínimo en 1998 (9,10‰). Volvió a remontar hasta llegar a un 11‰ en 2008, y a partir de este momento, disminuye por la crisis económica.

Índice Sintético de Fecundidad

Se estima que 2,1 hijos por mujer es la cifra imprescindible para que una población pueda reemplazarse; por debajo de esa cifra, una población entra en regresión demográfica. Este índice está en relación con la tasa bruta de fecundidad.

En España, este índice ha ido disminuyendo progresivamente. A principios del siglo XX, el número medio de hijos por mujer era de 4, pero en 1975, estaba cerca del 3 y continuó bajando progresivamente, con un mínimo en los años 1997-1998 de 1,2 hijos por mujer. Volvió a subir tímidamente, alcanzando 1,5 en 2005, pero a partir de 2008, el número medio de hijos por mujer volvió a descender.

La Mortalidad

Tasa de Mortalidad Bruta

Es el número de personas que fallecen por cada mil personas dentro de una población determinada y en un año determinado. En el Antiguo Régimen demográfico, las tasas de natalidad eran muy elevadas (40‰), lo que resultaba en un crecimiento muy lento. A partir del siglo XVIII, la mejora de la calidad de vida provocó un descenso progresivo de la mortalidad. Durante el siglo XIX, siguió descendiendo de forma muy lenta y progresiva, pero aún era elevada (más del 30‰).

En el siglo XX, las tasas descendieron rápidamente, aunque en la primera mitad hubo dos momentos en que se dispararon: la epidemia de gripe de 1918 y la Guerra Civil. Después de la guerra, fueron muy bajas (7‰, una de las más bajas del mundo). A finales de los 80 y principios de los 90, hubo una nueva subida, pero a principios del siglo XXI, volvió a descender debido al progreso económico a lo largo del siglo XX, al predominio de la población joven y a la llegada de inmigrantes.

Distribución Espacial de la Mortalidad

Las comunidades autónomas con una alta tasa de natalidad son las que tienen menor mortalidad. La tasa más baja se encuentra en Canarias, Ceuta y Melilla (5-6,5‰). Las comunidades con una mayor tasa de mortalidad (más de 11‰) son Extremadura, Castilla y León, Asturias, Galicia y Aragón.

Mortalidad Infantil

Es el número de niños que fallecen antes de cumplir un año por cada mil niños nacidos ese año. En el Antiguo Régimen, era muy alta (250-300‰), y en años de peste, aumentaba hasta un 500‰. En el siglo XX, la tasa de mortalidad infantil era de 170‰; a principios de la década de los 30, se situaba en un 125‰, y en el siglo XXI, hasta nuestros días, está en un 3,7‰. Esta cifra es casi imposible de seguir reduciendo, ya que se han superado las causas exógenas, pero persisten las endógenas de mortalidad infantil.

Esperanza de Vida

Es la edad media que una persona puede vivir en el momento de su nacimiento. La esperanza de vida en España ha aumentado de forma paulatina hasta superar los 80 años en la actualidad. Las mujeres españolas tienden a vivir más años que los hombres, tendencia que se mantiene. Tradicionalmente, las mujeres solían vivir más años debido a los trabajos más duros realizados por los hombres y un mayor consumo de alcohol y tabaco.

Crecimiento Demográfico

Crecimiento Vegetativo

Es la diferencia existente entre la mortalidad y la natalidad en un determinado lugar durante un año. El crecimiento será positivo cuando el número de nacimientos sea mayor que el de defunciones, y será negativo a la inversa.

En el Antiguo Régimen, el crecimiento vegetativo era muy lento y a veces interrumpido por catástrofes demográficas. Durante la etapa del siglo XVIII hasta aproximadamente 1950, el crecimiento vegetativo fue muy grande. Hubo una etapa de explosión demográfica con muchísimo crecimiento entre 1960 y principios de los años 80. A partir de los años 80 hasta los 90, hubo una caída del crecimiento hasta llegar al crecimiento cero, pero a partir del siglo XXI, volvió a crecer, aunque de forma muy ligera. En la actualidad, ha vuelto a descender debido a la crisis económica.

Las zonas de España con mayor crecimiento natural son Ceuta y Melilla, los archipiélagos (Canarias y Baleares), Andalucía, Murcia y Madrid. Las zonas con menor crecimiento son Galicia, Asturias, Cantabria, Aragón y Castilla y León.

Crecimiento Real

Es el crecimiento de la población teniendo en cuenta nacimientos y defunciones, pero también la inmigración y la emigración. La diferencia entre la inmigración y la emigración se llama saldo migratorio. El crecimiento real es el crecimiento vegetativo más el saldo migratorio.

Desde principios del siglo XX, la población española ha ido creciendo, por lo cual el crecimiento real es muy positivo a pesar de una fuerte emigración hacia América, porque aun así el crecimiento natural era muy elevado. A partir del año 1960 hasta 1975, la población española creció de forma considerable a pesar de que muchos españoles emigraron a zonas de Europa; esto se debió al alto crecimiento natural. Entre 1975 y el año 2000, el crecimiento fue más lento; la natalidad había descendido, pero España comenzó a recibir inmigrantes, lo que contribuye a una mayor natalidad y, al haber una población más joven, descendió la mortalidad.

Movimientos Migratorios

Definición y Tipos de Migraciones

Los movimientos migratorios son los desplazamientos de población de un lugar a otro por motivos que no sean ocio o turismo. La inmigración hace referencia a la llegada de personas a un lugar diferente. La emigración es la salida de población de un país a otro distinto.

Existen varios tipos de movimientos migratorios:

  • Atendiendo al tiempo:
    • Definitivos: Migraciones donde las personas no tienen intención de volver al país de origen.
    • Temporales:
      • De larga duración: Duran varios años.
      • Estacionarios: Duran unos meses.
      • Pendulares: Migraciones que duran unas horas y se producen diariamente al lugar de trabajo.
  • Atendiendo al espacio:
    • Interiores: Se dan dentro de un mismo país.
    • Exteriores: Se producen de un país a otro extranjero.
      • Intercontinentales: A otro continente.
      • Intracontinentales: Dentro del mismo continente.

Las causas de los movimientos migratorios pueden ser por razones religiosas, de tipo político, pero la inmensa mayoría se debe a razones económicas, por personas que buscan mejorar su calidad de vida. Esto se busca tanto en las migraciones exteriores como en las interiores.

Migraciones Exteriores

Etapas de las Migraciones Exteriores en España

  • Siglo XIX: Tras la pérdida de las colonias, se produce un corte en las migraciones a América. La mayoría se dirigieron hacia el norte de África, Marruecos y Argelia (colonias francesas), siendo la mayoría del sudeste español.
  • Finales del Siglo XIX – hasta 1950: La emigración se dirigió hacia América Latina, ya que eran países en crecimiento debido a la colonización y necesitaban mucha mano de obra.
  • 1950-1973: El principal destino de los emigrantes españoles fue Europa, debido a que estos países estaban creciendo económicamente después de la Segunda Guerra Mundial y necesitaban mucha mano de obra. En 1973, se produjo la crisis del petróleo, y los países de Europa entraron en crisis, por lo que muchos emigrantes regresaron a España.
  • 1973 – Finales del Siglo XX: La emigración exterior disminuyó. En el año 2008, volvieron a aumentar las emigraciones debido a la crisis económica actual.

Consecuencias de las Migraciones Exteriores

Las consecuencias de las migraciones exteriores se pueden dividir en positivas y negativas:

  • Consecuencias positivas:
    • Alivio de la presión sobre el mercado de trabajo en el país emisor.
    • Alivio de la presión demográfica al disminuir la población.
    • Entrada de divisas (remesas de capital extranjero), que permiten la adquisición de bienes de equipo y mejoran la economía del país.
  • Consecuencias negativas:
    • Costes demográficos: envejecimiento de la población.
    • Costes sociales: desestructuración familiar temporal y dificultades de adaptación para el emigrante.
    • Despoblamiento de ciertas zonas.
    • Las divisas no siempre suponen un ahorro significativo, a menudo se destinan al consumo familiar.

Migraciones Interiores

Etapas de las Migraciones Interiores en España

  • Siglos XVII y XIX: Hubo una tendencia a abandonar las zonas de interior de España hacia las zonas costeras, con la excepción de Madrid al ser capital de España. Esta tendencia se acentuó en el siglo XVIII, continuó hasta el siglo XIX y hasta casi nuestros días.
  • Siglo XIX y Primera Mitad del Siglo XX: Se dieron migraciones del campo a la ciudad. Durante la dictadura de Primo de Rivera, se construyeron muchas infraestructuras.
  • Años 60 y 70: Continuó un proceso de fuerte inmigración interior, con el desplazamiento de alrededor de 12 millones de españoles. Los principales puntos de destino fueron Madrid, Cataluña, la Comunidad Valenciana y las Baleares, como puntos clave receptores de población.
  • Desde 1973: Muchas industrias decayeron y cambiaron muchas tendencias migratorias:
    • Se amplió el número de provincias con saldo migratorio positivo.
    • Reconversión de áreas de inmigración a áreas de emigración: antiguos inmigrantes retornan a sus lugares de origen, donde la vida es más económica.
    • Aumento de los movimientos pendulares, es decir, el éxodo rural disminuye, lo cual es posible gracias a los medios de transporte y comunicación.
    • Cambio en el perfil de los inmigrantes: antes eran personas del campo que se desplazaban por trabajos poco cualificados (como la construcción), y en la actualidad son personas cualificadas que trabajan en el sector servicios.

Consecuencias de las Migraciones Interiores

  • En los lugares de inmigración (receptores):
    • Enriquecimiento cultural debido a la concentración de personas de distintas regiones del país.
    • Generación de una mayor oferta de trabajo.
    • Necesidad de nuevas infraestructuras debido al aumento de población.
  • En las zonas emisoras:
    • Principalmente consecuencias negativas: despoblación, deterioro de infraestructuras, envejecimiento de la población, etc.

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