1. Factores de Localización Industrial
Las materias primas, las fuentes de energía, las vías de comunicación, los sistemas de transporte, los capitales, los consumidores y la mano de obra han sido, tradicionalmente, los factores principales. También han condicionado la localización otras causas: históricas, económicas, políticas, sociales y medioambientales. La alteración de las condiciones de producción y las estrategias de localización de las empresas ha originado un desequilibrio que se ha consolidado como resultado de las economías de aglomeración y de una política industrial incapaz de corregir la polarización.
1.1. Proceso de Industrialización en España
Se inició más tarde (mediados del siglo XIX) y fue más lento debido a la falta de capital, espíritu emprendedor y tecnología propia. A comienzos del siglo XX, solo el 16% de la población activa trabajaba en la industria.
Primeras Áreas Industriales (Mediados del XIX – Años 60)
Las primeras áreas industriales se concentraron en:
- Cornisa Cantábrica y Litoral Mediterráneo: Factores de localización clave fueron la existencia de materias primas, fuentes de energía y puertos.
- Madrid: Su papel como centro financiero y administrativo atrajo a una población numerosa que estimuló el desarrollo industrial.
Estas zonas se consolidaron como atractivas y recibieron nuevas instalaciones productivas.
Planes de Desarrollo y Nuevos Espacios (Años 60)
En los años 60, la política indicativa de los Planes de Desarrollo trató de difundir las actividades industriales por todo el territorio a partir de los Polos de Desarrollo y de Promoción industrial. Aparecen entonces nuevos espacios industriales:
- Ejes industriales nacionales: A lo largo de las principales vías de comunicación entre las regiones más industrializadas (ejes del Ebro y del Mediterráneo).
- Ejes industriales resultantes de la política de Planes de Desarrollo Industrial: Litoral gallego y Andalucía occidental.
- Enclaves industriales aislados: Ciudades que instalaron industrias básicas (Puertollano, Ponferrada) o que fueron declaradas Polos de Desarrollo (Valladolid, Zaragoza).
La Crisis Industrial de 1975 y la Reestructuración
La crisis industrial de 1975 incidió más en la cornisa cantábrica (especializada en sectores industriales maduros) e influyó menos en las zonas que contaban con una actividad más diversificada, como el litoral mediterráneo.
En los años 80, se implementaron las Políticas de Reestructuración Empresarial con dos vertientes:
- Reconversión Industrial: Modernización que supuso el cierre de fábricas y el aumento del desempleo. Afectó a la zona cantábrica, Cataluña y a las industrias más tradicionales (siderúrgica, metalúrgica, naval y textil).
- Reindustrialización: De las zonas afectadas por la reconversión (ZUR y ZID). Buscaba la modernización de los sectores viables o la creación de industrias de tecnología punta. El resultado no fue muy efectivo.
Integración en la UE y Expansión (1986-2008)
La incorporación de España en la UE (1986) exigió cambios importantes en el sector. Durante el periodo 1996-2008, España continuó el ciclo económico de crecimiento. Crecieron las inversiones en tecnología e inversiones externas de multinacionales, aumentaron las exportaciones y se desarrollaron los sectores de perfil tecnológico medio y bajo, así como el del automóvil. Los ejes del Ebro y del litoral mediterráneo, junto con Madrid y Cataluña, fueron los de mayor expansión industrial.
Impacto de la Crisis de 2008
A partir de 2008, la crisis afectó a todos los sectores económicos y de forma muy importante a la industria. España es la quinta potencia industrial de la UE. Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana aportan casi la mitad del valor de la producción industrial del país y son las que más invierten en I+D+i.
Siguen teniendo importancia las economías de aglomeración, una forma de concentración industrial que atrae a estos lugares industrias relacionadas con las ya existentes. Por todo ello, el País Vasco, Cataluña, Valencia y Madrid han sido los lugares más idóneos para la instalación de industrias.
1.2. La Tercera Revolución Industrial y los Nuevos Factores de Localización
La actividad industrial está sometida a grandes transformaciones. Los cambios de la Tercera Revolución Industrial se basan en la innovación, aplicando los avances de la revolución tecnológica y científica a la obtención de nuevos productos, al proceso de producción, al trabajo, la gestión y el marketing.
Se han producido cambios en la estructura industrial: descentralización, flexibilización productiva, cambios en el tamaño de las empresas y en el empleo. Todo esto ha hecho que los factores tradicionales de localización pierdan importancia en favor de otros nuevos:
- Pierde importancia la proximidad a los recursos naturales (debido al abaratamiento del transporte de materias primas y la creación de sustitutos sintéticos).
- Es menor la influencia de la cercanía al mercado local de consumo (gracias a las mejoras en transporte y comunicación y la ampliación de áreas por la globalización).
- La mejora de los transportes y comunicaciones resta importancia a la distancia y revaloriza la accesibilidad.
- Mantiene su relevancia la mano de obra, tanto para las empresas que necesitan mucha y barata, como para las que requieren personal cualificado.
- Factores nuevos: El acceso a la innovación y a la información (esencial para ser competitivos) y que el territorio tenga ventajas competitivas (centros de investigación, capital humano, espíritu empresarial).
1.3. Tendencias Actuales de Localización Industrial: Difusión y Concentración
Los cambios señalados anteriormente han modificado el tipo de localización de las industrias, coexistiendo dos tendencias contrapuestas:
- Difusión o Deslocalización: Las empresas buscan reducir costes en lugares que ofrecen mayores ventajas.
- Concentración: Estimula la concentración de las industrias de alta tecnología, oficinas y servicios a la producción más cualificados en las llamadas áreas centrales, que reúnen las mejores dotaciones en equipamientos y servicios.
a) La Difusión hacia Espacios Periféricos
Viene condicionada por varios factores:
- Problemas en grandes concentraciones industriales (saturación en equipamientos e infraestructuras, suelos caros).
- Mejoras tecnológicas y en transporte que permiten localizar las industrias en zonas ventajosas.
- Desarrollo de la industrialización endógena basada en las ventajas competitivas de sus recursos.
Los sectores más afectados por la desconcentración o deslocalización son los sectores maduros, que reducen sus costes de producción y se instalan en espacios periféricos.
b) La Concentración Industrial
Se da en los espacios centrales debido a su fuerte atractivo. Se instalan actividades industriales más desarrolladas: sectores de nuevas tecnologías, sedes sociales y de gestión de las grandes empresas.
2. Distribución Actual de la Industria en España
La localización industrial actual se concentra en el área cantábrica y mediterránea, en Madrid y en el eje del Valle del Ebro. El interior peninsular y los archipiélagos balear y canario presentan una escasa implantación industrial. Esto mantiene fuertes desequilibrios territoriales, fuente de otros desequilibrios como el reparto de la población y la riqueza, que ha afectado gravemente a las regiones menos industrializadas. Así, diferenciamos:
2.1. Áreas Industriales Desarrolladas
Son los espacios centrales de las áreas metropolitanas de Madrid y Barcelona, los principales focos de la industria española. En estas zonas se ha producido la reconversión de los sectores maduros y una revitalización industrial, favoreciendo una terciarización de su industria (parques tecnológicos y empresariales).
2.2. Áreas Industriales en Expansión
Están recibiendo implantaciones industriales, ya sea por la difusión de la industria o por el desarrollo de la industrialización endógena. Distinguimos varios tipos:
- Las coronas metropolitanas: Áreas industriales en declive y en proceso de reconversión, pero también receptoras de industrias. Reciben industrias tradicionales deslocalizadas desde las áreas centrales metropolitanas (polígonos industriales en vías de comunicación) y atraen a empresas innovadoras (parques tecnológicos).
- Las franjas periurbanas: Atractivas para relocalizar industrias de las ciudades próximas o para instalar nuevas industrias (pequeñas, de poco capital, que necesitan mano de obra poco cualificada y flexible, producciones tradicionales, en polígonos de naves adosadas pequeñas).
- Los ejes de desarrollo industrial: Situados en vías de comunicación.
Ejes a Escala Nacional y Regional
- A escala nacional: Ejes del Valle del Ebro y del Mediterráneo, conectados mediante una red de autopistas con las principales ciudades.
- A escala regional y comarcal: Ejes en torno a Madrid y en los interiores.
- Las áreas rurales bien comunicadas: Son empresas pequeñas, poco capitalizadas, que necesitan trabajo poco cualificado y flexible, producción tradicional. Pueden ser empresas urbanas relocalizadas o empresas promovidas por empresarios autóctonos que aprovechan los recursos del entorno. Sin embargo, están apareciendo empresas innovadoras.
2.3. Áreas y Ejes Industriales en Declive
Se encuentran en declive industrial, principalmente en la cornisa cantábrica y en emplazamientos concretos.
Causas del Declive:
- Especialización en sectores maduros que han sufrido una grave reconversión.
- Dificultades para la reindustrialización.
- Grave deterioro medioambiental por el predominio de industrias muy contaminantes o de solares y naves abandonadas.
- Crecimiento urbano desorganizado y de baja calidad.
Las consecuencias de esta situación han sido: desindustrialización, emigración y pérdida de competitividad. No obstante, hay zonas que son ejemplo de revitalización industrial, como el País Vasco desde 1995.
2.4. Áreas de Industrialización Inducida y Escasa
Se caracterizan por industrias pequeñas, tradicionales y dispersas.
- Áreas de Industrialización Inducida: Se sitúan en Aragón, Castilla y León y Andalucía. Se crearon enclaves industriales con las políticas de desarrollo industrial en los años 60. Se concentraron inversiones, empleo y producción en puntos concretos, pero no se difundieron hacia zonas próximas.
- Áreas de Industrialización Escasa: Son Castilla-La Mancha, Extremadura, Baleares y Canarias, debido a su localización poco competitiva, sectores tradicionales y pymes. Castilla-La Mancha, en los últimos años, se ve favorecida por la difusión de la industria madrileña.
Conclusión
La distribución actual de la industria española mantiene los desequilibrios territoriales heredados del pasado, que repercuten en un desigual reparto de la población y la riqueza. Se distinguen grandes regiones industriales en situaciones muy desiguales, y este desequilibrio aumenta si observamos el tipo de industrias existentes. Desde todas las instituciones (Unión Europea, Gobierno del Estado, Comunidades Autónomas y Ayuntamientos) se llevan a cabo acciones políticas para corregir las desigualdades regionales industriales, equilibrar el territorio y aportar soluciones y alternativas para paliar las consecuencias de la crisis financiera mundial sobre la industria.
