El Sector Secundario en la Unión Europea
La Actividad Minera
La UE es deficitaria en recursos mineros y realiza cuantiosas importaciones. Los yacimientos de hierro en Gran Bretaña, Alemania o Francia han perdido importancia; otros se encuentran agotados.
La Actividad Energética
El objetivo primordial es garantizar el abastecimiento energético, asegurando que este sea seguro, diversificado y regular. Para ello, se establecen acuerdos con los países proveedores y se fomenta la conexión entre las naciones miembros mediante redes transeuropeas de energía, entre otras medidas. Se persigue un crecimiento sostenible, inteligente y competitivo (con metas como aumentar un 20% la eficiencia energética para 2020) y se prioriza el cuidado del medioambiente (por ejemplo, con el objetivo de reducir un 20% las emisiones contaminantes).
La Industria
La UE es una potencia industrial significativa a nivel mundial.
A) Estructura Industrial
La estructura industrial se caracteriza por una población activa en el sector que tiende a descender. Predominan las PYMES (Pequeñas y Medianas Empresas), aunque, impulsadas por la globalización, estas tienden a aumentar su dimensión, internacionalizándose, innovando en sus procesos de producción y gestión, y ofreciendo productos diferenciados que destacan por su calidad y diseño. La producción industrial abarca diversos tipos de sectores:
- Sectores maduros en declive: como la siderurgia y los astilleros.
- Sectores dinámicos: tales como el alimentario, el químico, el de vehículos de motor y la ingeniería eléctrica.
- Sectores de alta tecnología: incluyendo la aeronáutica, la biotecnología, entre otros.
B) Áreas Industriales de la UE
Las áreas industriales en la Unión Europea presentan una localización selectiva. El área más industrializada es el eje en torno al Canal de la Mancha, que se prolonga hacia el sur por el valle del Rin y la llanura del Po, y hacia el este por regiones como Bohemia y Silesia. También se observa una difusión industrial hacia el arco mediterráneo y hacia los países del Este, atraída en parte por salarios más bajos. En el resto del territorio, existen enclaves industriales aislados, generalmente en las capitales estatales o en las grandes ciudades.
Áreas de Base Extractiva
Estas áreas están ligadas a la transformación de productos voluminosos. El carbón y sus industrias derivadas se instalaron durante la Revolución Industrial en Gran Bretaña (zona centro), Alemania (regiones del Ruhr y Sarre), Bélgica, Europa Central, Francia (norte) y España (Asturias). En el siglo XX, la explotación de petróleo del Mar del Norte dio lugar al desarrollo de industrias químicas y energéticas.
Áreas Portuarias
En estas zonas se instalaron industrias de primera transformación (como petroquímicas, siderurgia y aluminio), industrias ligadas al mar (astilleros, conserveras), empresas de transporte y almacenamiento, y productoras de bienes de consumo para el entorno local y regional. Es el caso de importantes puertos atlánticos como Róterdam, Amberes, Hamburgo, Bremen, Londres o Bilbao; y mediterráneos como Marsella, Génova, Barcelona o El Pireo. Un fenómeno similar ocurre en los puertos fluviales de los grandes ríos navegables, como el Rin (por ejemplo, Estrasburgo).
Grandes Áreas Urbanas
Históricamente, acogieron industrias diversificadas (productores de bienes de consumo, de equipo y semielaborados). Actualmente, estas áreas atraen a los sectores más innovadores, incluyendo servicios a la producción y las sedes de las grandes empresas.
Áreas de Industria Dispersa
Se localizan en espacios periurbanos, ciudades pequeñas y áreas rurales. Su desarrollo se debe a procesos de difusión y relocalización industrial, o a iniciativas endógenas (como es el caso de la Comunidad Valenciana en España, el sur de Suecia o el sur de Baviera en Alemania).
Ejes de Difusión Industrial
Estos ejes se han creado a lo largo de las principales vías de comunicación que conectan las zonas más industrializadas entre sí, y a estas con Europa Central y Oriental.
C) Política Industrial de la UE
La política industrial de la UE busca mejorar la calidad de las instalaciones y productos, así como su seguridad. Además, persigue contribuir a las tres prioridades de la Estrategia Europa 2020:
- Crecimiento inteligente: fomentando la inversión en nuevas tecnologías y en I+D+i (Investigación, Desarrollo e innovación).
- Crecimiento sostenible: implementando medidas para aumentar la competitividad frente a los retos de la globalización y las nuevas potencias económicas emergentes.
A estos objetivos se une la promoción del cuidado del medioambiente y la búsqueda de un crecimiento que sea integrador en todas las regiones de la Unión.
El Sector Servicios en la Unión Europea
El sector servicios es la principal actividad económica en la UE, representando aproximadamente el 60% del empleo y del Producto Interior Bruto (PIB). Dentro de la Unión, destacan las naciones de Europa Occidental. Entre los subsectores más importantes se encuentran el transporte, el comercio y el turismo.
Transporte y Telecomunicaciones
A) Sistema de Transporte y Telecomunicaciones
Un sistema eficiente de transporte y telecomunicaciones es esencial para la vertebración territorial de la UE, el desarrollo del mercado único y el progreso de las regiones más atrasadas. La UE dispone de una densa red de autovías, autopistas y ferrocarriles, una importante flota mercante, numerosos aeropuertos y una extensa red transeuropea de telecomunicaciones.
B) Redes de Transporte
Las redes de transporte más densas y mejor equipadas se concentran en Europa Occidental, especialmente en el denominado Eje del Rin y en las grandes áreas metropolitanas. En contraste, el Este de Europa, así como las regiones periféricas, montañosas y rurales, presentan déficits en infraestructuras de transporte.
C) Política de Transporte y Telecomunicaciones
La política de la UE en este ámbito pretende desarrollar las Redes Transeuropeas de Transporte (RTE-T) con los siguientes objetivos fundamentales:
- Mejorar las infraestructuras en las periferias geográficas de la Unión.
- Equilibrar los diferentes modos de transporte, potenciando la intermodalidad (por ejemplo, combinando ferrocarril-carretera o ferrocarril-navegación).
- Reducir el impacto medioambiental generado por el sector del transporte.