El Transporte Aéreo en España
Comenzó en 1919 en España, y pronto se pusieron en funcionamiento líneas comerciales entre Sevilla y Larache, y entre Madrid y Barcelona, Mallorca, Valencia y Sevilla. Más tarde se abrieron las internacionales, y en 1926 se cruzó el Atlántico.
Con el tiempo, se generalizaron los aviones a reacción, iniciando una nueva era marcada por el aumento de la capacidad de carga de los aparatos, mayor autonomía de vuelo y velocidad de crucero. Todo esto repercutió en los desplazamientos de larga distancia y benefició a España, que se configuraba como destino turístico.
Ha experimentado un rápido desarrollo. España cuenta con una extensa red de aeropuertos, aunque muy jerarquizada. Madrid-Barajas, junto con Barcelona, presenta un tráfico de pasajeros muy estabilizado en cuanto a cifras. Le siguen los de Mallorca, Málaga, Canarias, entre otros.
Características del Transporte Aéreo
El transporte aéreo presenta las siguientes características:
Competencias sobre los aeropuertos
Las competencias sobre los aeropuertos están repartidas: el Estado controla los aeropuertos de interés comercial, y las comunidades autónomas, los demás.
La red aeroportuaria
La red aeroportuaria cuenta con numerosos aeropuertos, ya que hasta la década de 1960 se siguió la política de que todas las ciudades de cierto tamaño contasen con uno (modelo aeropuerto-ciudad). La estructura de la red es radial y jerárquica: Madrid-Barajas funciona como «hub» o aeropuerto central, con conexiones directas a casi todos los aeropuertos españoles y a los principales del extranjero. Los aeropuertos periféricos, en muchos casos, deben realizar sus enlaces a través de Barajas.
Tráfico de pasajeros y mercancías
El tráfico de pasajeros y mercancías presenta grandes contrastes:
- El tráfico de pasajeros es muy competitivo en distancias medias y largas por su rapidez y comodidad.
- El tráfico de mercancías, en cambio, es escaso debido al elevado coste, que repercute en el precio final de los productos transportados. Por tanto, se centra en los bienes perecederos o valiosos.
Desequilibrios territoriales en el tráfico aéreo
Existen desequilibrios territoriales en el tráfico aéreo. Los principales aeropuertos se encuentran en los núcleos urbanos, económicos y turísticos más destacados. Así, Madrid-Barajas explica su preeminencia por su papel como «hub», por la gran extensión urbana de Madrid y por las funciones de la ciudad como capital, centro financiero y de negocios del país. El aeropuerto de Barcelona-El Prat está incrementando su papel de «hub» y se beneficia del atractivo turístico de la ciudad. Los aeropuertos de Baleares, Canarias y del litoral mediterráneo reciben numerosos flujos turísticos internacionales y nacionales. El aeropuerto de Bilbao, por su parte, cuenta con un tráfico principalmente nacional y regional, motivado por la importancia de su área urbana y su papel troncal para otros aeropuertos regionales. En cambio, algunos pequeños aeropuertos están infrautilizados y son poco rentables.
Actuaciones medioambientales
Las actuaciones medioambientales relativas al transporte aéreo se centran en retirar los aviones más contaminantes y ruidosos. Además, las aerolíneas y los aeropuertos incorporan sistemas de gestión medioambiental.
El Plan Estratégico de Infraestructuras de Transporte (PEIT)
El Plan Estratégico de Infraestructuras de Transporte (PEIT) pretende una especialización de los aeropuertos en función de sus ventajas comparativas. Así, Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat deben funcionar como «hub» y convertirse en una puerta internacional de entrada a Europa, alternativa a los grandes aeropuertos europeos congestionados. El resto de los aeropuertos, sobre todo los ubicados en las mayores ciudades, deben impulsar su participación en los servicios intraeuropeos, aprovechando la liberalización del sector. El Plan se propone también mejorar el acceso urbano a los aeropuertos y los servicios e infraestructuras (construcción de nuevas pistas y mejora del control aéreo y de la seguridad en tierra).
Integración aérea con la Unión Europea
La integración aérea con la Unión Europea se realiza mediante el proyecto «Cielo Único Europeo», que pretende armonizar la gestión del tráfico aéreo para evitar la congestión aeroportuaria. En este sentido, España debe aprovechar su liderazgo tecnológico para conseguir la expansión internacional de equipos, servicios y sistemas de navegación aérea españoles y participar en proyectos de innovación tecnológica, como Galileo (navegación por satélite).
El Transporte Intermodal
En la actualidad, la Unión Europea y España fomentan el transporte intermodal, es decir, el uso de varios modos en la misma cadena de transporte. Los objetivos son corregir el predominio de la carretera y evitar infraestructuras redundantes. El Plan Intermodal español contempla redes para el transporte de mercancías y viajeros.
Transporte Intermodal de Mercancías
El transporte intermodal de mercancías utiliza principalmente el sistema de contenedores. Estos, una vez cargados, forman una «unidad de carga» o UTI (Unidad de Transporte Intermodal) que se transporta entre los distintos modos sin acceder a la mercancía que contienen.
La logística del transporte de mercancías
La logística del transporte de mercancías comprende la planificación, la organización, la gestión y la realización de las actividades de transporte de mercancías en la cadena de suministro. Entre estas actividades se encuentran el suministro de materias primas a la industria, la distribución de mercancías a almacenes y centros de distribución, la clasificación y el embalaje, la transferencia de mercancías de un modo de transporte a otro y el reparto hasta el punto final.
Las plataformas logísticas
Los puertos secos
Transporte Intermodal de Viajeros
El transporte intermodal de viajeros también prevé una red compuesta de corredores y de nodos donde se localizan los intercambiadores entre los distintos modos de transporte.
también prevé una red compuesta de corredores y de nodos donde se localizan los intercambiadores entre los distintos modos de transporte.
Las Comunicaciones
Las comunicaciones transmiten información entre un emisor y un receptor. Desde mediados del siglo XIX se han perfeccionado continuamente con la sucesiva aparición del telégrafo y el teléfono, la radio y la televisión, los aparatos de vídeo y audio y el ordenador personal.
Los avances de la informática y de las telecomunicaciones permiten acceder a una enorme cantidad de información a través de las «autopistas de la información», constituidas por redes electrónicas por las que circulan textos, imágenes y sonido de forma instantánea desde cualquier punto de la Tierra. Su máximo exponente es Internet. Estas redes son esenciales para el desarrollo económico y para el actual proceso de globalización, pues eliminan el espacio físico entre los lugares hasta el punto de que ya no importa tanto gozar de una posición central en el espacio geográfico como estar bien conectado a las redes de telecomunicación; facilitan las operaciones económicas y están revolucionando los modos de investigación y el trabajo profesional. Permiten también almacenar, procesar y difundir la información a cualquier lugar de la Tierra a través de satélites y de sistemas como el correo electrónico.
En España, la red de telecomunicaciones, especialmente la red telefónica, ha experimentado un fuerte crecimiento, aunque inferior al de otros países de su entorno. Además, existen desequilibrios regionales en su distribución. Así, la red de telecomunicaciones está más extendida en ciudades de mayor dinamismo económico que en las áreas rurales y ciudades menos dinámicas. Por otra parte, Madrid es el nodo principal de la red, que recibe flujos de todas las provincias, mientras que muchas de estas son nodos secundarios de sus propios subsistemas regionales o de otros sistemas regionales próximos.