El Turismo en España: Características, Impactos y Desafíos
El turismo es la actividad económica que permite y explota los viajes de ocio y placer. Este fenómeno de masas ocasiona el desplazamiento de cientos de millones de personas y es fuente de ingresos y empleo para muchos países.
Turista es toda persona que se desplaza a un lugar distinto de su entorno habitual, dentro o fuera de su país, con una duración menor de un año y con la finalidad de ejercer actividades recreativas. Se puede diferenciar entre turismo exterior y turismo interior.
Importancia Económica del Turismo en España
En cuanto a la importancia del turismo, en 2019 España fue el segundo destino turístico mundial con 83,5 millones de turistas, lo que supuso el 12,4% del PIB.
Tras la crisis de 2008 y hasta la pandemia, fue el sector que más contribuyó a la recuperación económica, aunque durante la crisis de la COVID-19 el turismo sufrió un descenso del 69,4%.
Características y Problemas del Turismo Español
- Estacionalidad: El 40% de los turistas eligen el verano, lo que provoca la infrautilización de hoteles durante varios meses y genera problemas de empleo.
- Concentración Espacial: El litoral mediterráneo y los archipiélagos concentran el 85% de los turistas.
- Concentración de la Demanda: El 55% de los turistas proceden de Reino Unido, Alemania y Francia.
- Dependencia de Tour Operadores Extranjeros: Estos ofrecen paquetes «todo incluido» que los clientes pagan en su propio país, y su presencia en España es escasa.
- Amplia Oferta Extrahotelera: Parte del alojamiento turístico se realiza en apartamentos no declarados o en establecimientos hoteleros independientes.
- Necesidad de Aumentar la Calidad: Los servicios turísticos deben mejorar frente a la tendencia de lo masificado y barato.
Repercusiones del Turismo en España
Repercusiones Demográficas
- El modelo de Sol y Playa atrae a millones de turistas al litoral español y a los archipiélagos, lo que genera una estructura demográfica particular.
- Los servicios turísticos generan empleos ocupados por inmigrantes (extranjeros y nacionales), contribuyendo a una población menos envejecida.
- La oferta turística y las políticas de mejora impulsan un fuerte desarrollo de la construcción de edificios con fines turísticos.
- Los turistas jubilados que residen durante el invierno en España contribuyen a pirámides de población con un envejecimiento acentuado.
- El turismo impulsa una alta densidad de construcción.
- La residencia de los turistas añade población, modificando el número de habitantes, la estructura de edades y los servicios necesarios para ellos.
- La llegada de personas con costumbres distintas produce una diversidad cultural que influye en las costumbres de la población local.
- En las zonas turísticas de interior emergentes, el turismo ha frenado la despoblación y ha estimulado la artesanía y el comercio local.
Repercusiones Medioambientales
El turismo también tiene unas repercusiones medioambientales negativas. Los principales problemas se concentran en zonas del litoral y los archipiélagos, donde se han desarrollado infraestructuras muy rentables económicamente, pero sin considerar la sostenibilidad ambiental. La llegada de turistas genera un mayor consumo, lo que a su vez produce más residuos y gases contaminantes. Encontramos varias repercusiones:
- Transformación del Medio: Por la contaminación de playas litorales y de zonas forestales.
- Impacto Paisajístico: Las edificaciones turísticas contribuyen a la degradación del paisaje, y en la montaña las instalaciones invernales ocupan y degradan zonas forestales.
- Aumento de la Contaminación: Contaminación acústica (por obras, tráfico y lugares de ocio) y contaminación de aguas residuales por tratamientos inadecuados.
- Alta Densidad de Construcción y Especulación del Suelo.
Finalmente, cabe señalar que el cambio climático ha llevado a replantear la relación tradicional entre clima y turismo.
Movimientos Migratorios en España: Tipos, Evolución y Consecuencias
España cuenta en la actualidad con una población de 47.398.700 habitantes. Una de las principales características de esta población es su desigual distribución espacial, en parte fruto de las migraciones internacionales y de los movimientos migratorios nacionales.
Los movimientos espaciales o migraciones son los desplazamientos de la población que conllevan un cambio de residencia. Se pueden establecer varios tipos de migraciones según sus características:
- Según su naturaleza, podemos distinguir entre voluntarias o forzosas. Las primeras se producen por motivaciones económicas. Las forzosas se deben a causas naturales o, más frecuentemente, a causas humanas como guerras, que generan refugiados en busca de asilo político.
- Según su duración, podemos distinguir entre migraciones definitivas o temporales. Estas últimas tienen una duración determinada.
- Según el espacio, podemos distinguir entre migraciones interiores (o nacionales), si tienen lugar dentro del mismo país, y exteriores (o internacionales), cuando se producen entre países distintos.
Evolución de los Movimientos Migratorios desde Mediados del Siglo XX
Emigración Interior
El desplazamiento de personas desde las áreas rurales a las urbanas es uno de los fenómenos geodemográficos de mayor importancia. Los principales flujos han sido:
- Del interior a la costa: La llegada de población a las zonas más dinámicas económicamente por la consolidación del turismo como motor económico.
- El Éxodo Rural: Fruto de la mecanización agraria y la industrialización urbana paralelas, que generó una emigración masiva del campo a la ciudad en los años del desarrollismo. Ciudades como Madrid, Barcelona o Zaragoza atrajeron población en detrimento de otras regiones comparativamente desfavorecidas.
Así, en estos años se produjo un desequilibrio: pocas provincias con crecimiento económico y demográfico muy por encima de la media, otras con un crecimiento muy inferior, y muchas con decrecimiento demográfico directo fruto del saldo migratorio negativo. Este proceso explica que en la actualidad el 80% de los españoles viva en ciudades, mientras que a comienzos del siglo XX el 70% era población rural.
Las principales áreas de inmigración fueron las islas, el arco Mediterráneo, Madrid y el País Vasco.
Las principales zonas de salida fueron las de mayor atraso económico: Andalucía, Extremadura, Galicia o Castilla-La Mancha. Igualmente, la reconversión industrial explica el saldo migratorio negativo de Asturias.
En estos flujos migratorios hay que tener en cuenta el ‘efecto llamada’, es decir, la atracción de familiares y/o conocidos del lugar de origen al lugar de destino.
Problemática Derivada de la Emigración Interior
Las repercusiones de las migraciones interiores se dejan sentir especialmente en los planos demográfico y económico.
- Consecuencias Demográficas: Resulta evidente el grave problema de envejecimiento y despoblación que sufren las zonas emigrantes, lo que ha llevado al surgimiento de plataformas como Teruel Existe que reivindican soluciones a este grave problema para el futuro de estas regiones. Hay que tener en cuenta que las provincias situadas en el Sistema Ibérico tienen una densidad inferior a 10 hab/km².
- Por el contrario, las zonas receptoras de inmigración tienen un claro rejuvenecimiento de la población con tasas de natalidad más elevadas y mortalidad más bajas, aunque también encontramos problemas por la elevada presión demográfica sobre el territorio, con densidades de más de 300 hab/km² en provincias como Barcelona o Vizcaya, que genera falta de infraestructuras, problemas de movilidad, gestión de residuos y contaminación atmosférica.
- Consecuencias Económicas: Estas consecuencias demográficas están ligadas a las económicas, con un grave proceso de declive económico en las zonas de salida de población, especialmente en el mundo rural, con un abandono de actividades económicas y falta de servicios e infraestructuras por falta de demanda y consumo.