Las Unidades de Relieve de la Península Ibérica y su Dinámica. Los Rasgos Geomorfológicos de Castilla y León
1. La Dinámica del Relieve Peninsular
España conforma, junto con Portugal, Andorra y Gibraltar, la Península Ibérica, cuyo relieve se caracteriza por unos fuertes contrastes, alternando cordilleras con mesetas y depresiones, que le confieren una riqueza y variedad poco comunes. El relieve actual de la Península Ibérica es el resultado de un lento proceso que se desarrolla a lo largo de las cuatro Eras geológicas: la Era Primaria, la Era Secundaria, la Era Terciaria y la Era Cuaternaria.
1.1. Zócalo Herciniano y Sedimentación Secundaria
La Era Primaria fue tan larga que dio tiempo a que se formaran montañas y que posteriormente la erosión las fuera destruyendo hasta sus raíces. Quedó así una superficie plana e inclinada ligeramente hacia el Este, constituida por los materiales más antiguos y, por tanto, más rígidos de la Península Ibérica: cuarcitas, pizarras y granitos. Es el llamado zócalo herciniano, que se localizaba fundamentalmente en la parte central y occidental de la actual Península Ibérica. Durante la Era Secundaria o Mesozoico, continuó en el Oeste el proceso erosivo de las raíces montañosas; a la vez, en la mitad oriental de la Península, basculada hacia el Este e invadida por el mar, se depositaron grandes acumulaciones de sedimentos marinos. Así se originan, entre otros materiales, las calizas secundarias de origen marino, que en algunas zonas alcanzaron unos enormes espesores; son los llamados geosinclinales.
1.2. Formación del Relieve Actual
La Era Terciaria es el período clave para la historia geológica peninsular; todo lo anterior fue afectado por los movimientos tectónicos del interior de la Tierra, dando lugar a la construcción del conjunto del relieve peninsular en sus grandes líneas actuales. En la zona central y occidental de la Península, el zócalo de materiales rígidos del Primario sufrió deformaciones:
- Unas zonas se elevaron en conjunto mediante fallas, originando los macizos montañosos de las montañas interiores (como el Sistema Central) y de parte de las montañas circundantes (como el Macizo Asturiano).
1.3. Estructura Lítica de la Península
Como consecuencia de la evolución geológica experimentada por la Península, se aprecian en ella tres dominios litológicos claramente definidos:
- La Iberia Silícea corresponde a las zonas donde afloran hoy en superficie restos de los macizos paleozoicos. Ocupa la parte occidental de la Península (Galicia y Asturias, el oeste de la Meseta, Sistema Central, Montes de Toledo y Sierra Morena) y aparece parcialmente en las cordilleras terciarias (Pirineos, Cordillera Penibética, Cordillera Costero-Catalana y Sistema Ibérico).
- La Iberia Caliza está constituida por materiales sedimentarios (calizas, margas, yesos) depositados en los fondos marinos durante el Secundario, que fueron plegados en el Terciario con la Orogenia Alpina.
- La Iberia Arcillosa corresponde a las depresiones exteriores, a las cuencas sedimentarias de las dos mesetas y a las llanuras litorales, en las que a lo largo del Terciario y Cuaternario se depositaron potentes materiales sedimentarios.
2. Las Unidades del Relieve de la Península Ibérica
2.1. Rasgos Generales del Relieve Peninsular Español
Los rasgos del relieve peninsular español, mediante una caracterización general de tipo topográfico, son:
- Una Península maciza y compacta.
- Elevada altitud media.
- Variedad de formas del relieve y de su composición lítica y estructural.
- Ordenación concéntrica del relieve.
El relieve de la Península se organiza en torno a una gran zona central, relativamente llana, el Macizo Central Ibérico, alrededor de la cual se disponen las restantes unidades de relieve:
A. El Macizo Central Ibérico
1. La Meseta
La Meseta está constituida por un antiguo zócalo herciniano, recubierto posteriormente en su parte oriental por rocas sedimentarias más modernas, y fracturado en parte por la Orogenia Alpina. Por eso, desde un punto de vista geomorfológico se pueden diferenciar tres tipos de unidades distintas:
- Las penillanuras corresponden a los afloramientos del antiguo zócalo paleozoico y están constituidas por materiales silíceos.
- Las cuencas sedimentarias ocupan la parte central y oriental de la Meseta. En ellas, el zócalo paleozoico, fracturado y hundido en la Orogenia Alpina, está recubierto por materiales sedimentarios terciarios.
- Las sierras interiores de la Meseta. La Meseta aparece dividida por los macizos montañosos del Sistema Central y los Montes de Toledo. El Sistema Central es una alineación montañosa NE-SO que divide en dos la Meseta.
2. Los Bordes Montañosos de la Meseta
- El Macizo Galaico-Leonés. Se trata del sector NO del antiguo zócalo paleozoico, fracturado por la Orogenia Alpina. Presenta materiales silíceos y montañas de cumbres redondeadas de escasa altura. El relieve de esta unidad se escalona desde la costa hasta los Montes de León, pudiendo distinguirse los siguientes sectores:
- Los Montes de León.
- Las montañas y cuencas medias.
- Las sierras litorales.
- La Cordillera Cantábrica. Es una cadena montañosa que delimita el borde septentrional de la Meseta. Está formada por sectores muy diferenciados.
- El Sistema Ibérico. Es una alineación muy compleja que separa la Meseta de la Depresión del Ebro. Está formado en su mayor parte por materiales calizos depositados en el borde del Macizo Hespérico, que fueron posteriormente plegados durante la Orogenia Alpina.
- Sierra Morena.
B. Los Bordes Alpinos
1. Las Montañas Exteriores
Las cordilleras exteriores a la Meseta son montañas jóvenes de relieves vigorosos, que se formaron con la Orogenia Alpina al plegarse los grandes depósitos de materiales sedimentarios acumulados en profundas fosas marinas. Estas cordilleras presentan una gran complejidad litológica, ya que combinan estas estructuras plegadas con afloramientos de fragmentos de los viejos zócalos paleozoicos.
- Los Pirineos. Constituyen una cordillera con estructura compleja, en la que se distinguen varias unidades.
- Los Montes Vascos.
- La Cordillera Costero-Catalana.
- Las Cordilleras Béticas.
- La Cordillera Penibética, junto a la costa, está formada por materiales paleozoicos.
- La Cordillera Subbética, en el interior, está constituida por un conjunto de sierras (Grazalema, Cazorla, Segura, etc.) de materiales secundarios (calizas) plegados en la Orogenia Alpina.
2. Las Depresiones Exteriores: Depresiones del Ebro y del Guadalquivir
Las depresiones terciarias del Ebro y del Guadalquivir tienen rasgos comunes. Son fosas prealpinas, de forma triangular, constituidas por materiales sedimentarios de la época terciaria.
3. Rasgos Geomorfológicos de Castilla y León
El relieve de la Comunidad Autónoma de Castilla y León participa, en sus rasgos y en sus orígenes, de aquellos que son propios del Macizo Central Ibérico. Así pues, se compone de una cuenca sedimentaria terciaria (en el centro) y penillanuras (en el oeste), bordeada por montañas de tipo macizos antiguos (de materiales paleozoicos) y del tipo montañas plegadas (con materiales secundarios).